28 de diciembre 2020 | 5:00 am
El uso de efectivo sigue predominando en México, aunque el impulso que vivió el mundo digital durante la pandemia impulsó la tecnología cashless durante 2020.
El Buen Fin 2020 dejó una derrama de 238,900 millones de pesos, lo que representa 188.5 millones de transacciones. El 53% de las compras se realizaron en forma presencial y el 47% vía on-line.
En normal, hubo un crecimiento de 157% en las ventas totales y 225% de evolución en el crecimiento de las ventas en línea frente a la edición 2019, de acuerdo con datos de Concanaco-Servytur.
Prácticamente todos los países del mundo, en algún momento del año, pusieron en pausa las actividades económicas no esenciales para prevenir los contagios y solicitaron a sus habitantes quedarse en casa, de tal forma que la imposibilidad de ejecutar pagos físicamente aceleró la adopción del canal de compras en línea y, por ende, agilizó el uso de medios de pago electrónicos y digitales al grado que hoy ya forman parte de nuestros hábitos
explicó Alejandro Morales, director normal de Prosa
A nivel mundial, el uso de efectivo es menos común que en México y la región de Latinoamérica. En Europa, según Prosa, tres países llevan la delantera: Suecia, donde el 95% de las transacciones se realizan por medios digitales; Noruega, donde solo 3% del dinero gubernamental no es cashless, y Canadá, país que prevé que para 2024 los pagos contactless alcancen los 6 billones de dólares a nivel mundial.
México aún está lejos de igualar esas cifras debido a los retos que debe enfrentar, entre ellos que solo 40% de la población está bancarizada.
De acuerdo con datos de la Asociación Mexicana de Ventas On-line (AMVO), el 86% del comprador omnicanal mexicano cuenta con una tarjeta de débito, solo 61% de los compradores offline cuenta con una tarjeta de este tipo y únicamente 21% cuenta con una tarjeta de crédito.
Durante la edición 2020 del Buen Fin, 95% de los usuarios del banco prefirieron pagar con tarjeta de débito o crédito, mientras que solo 5% con tarjeta digital, según un estudio realizado por la fintech Bnext.
Los servicios financieros de las fintech (mediante teléfonos móviles) y el crecimiento del comercio electrónico serán dos factores que podrían ayudar a que la tecnología cashless gane terreno en el país como ha sucedido en otras latitudes.
Asia-Pacífico superó a Europa y América del Norte para convertirse en el líder en volumen de transacciones sin uso de efectivo en 2019.
El aumento fue impulsado por el un incremento en el uso de teléfonos inteligentes, el auge del comercio electrónico, la adopción de billeteras digitales y las innovaciones en pagos móviles o con códigos QR liderados por China, India y otros mercados del sudeste asiático, de acuerdo con el Reporte Mundial de Pagos 2020 realizado por Capgemini.
