Las dos empleadas de la Municipalidad de la Capital denunciadas por el presunto cobro de coimas negaron la acusacin en su contra y aseguraron que concurrieron al lugar a comprar alimentos. “Fuimos a la pizzera a comprar comida. Nuestro horario laboral es de 18 a 2, a veces hasta las 3 de la maana, y todos los das compramos comida. Siempre vamos a un negocio que est abierto o donde nos permitan encargar”, explicaron.
En dilogo con El Ancasti, aseguraron que son vctimas de una acusacin “falsa” y cuestionaron duramente el accionar de los policas que por orden del fiscal de instruccin Federico Maturano les secuestraron los telfonos celulares. “Al llegar a la pizzera no alcanzamos a pararnos en la vereda y ya estaban los policas. Quedamos prcticamente demoradas sin que nos muestren una orden judicial y sin que exista una denuncia en nuestra contra”, manifestaron.
Y agregaron: “Inclusive nos secuestraron los telfonos pese a que nosotras no dimos nuestro consentimiento”.
Consideraron que el accionar policial fue “abusivo” porque en ningn momento hubo private policial femenino durante el operativo.
El hecho se registr el viernes a la noche cuando un motoquero (supply) fue sorprendido por las dos agentes cuando circulaba en su moto. Segn el trabajador, las municipales se negaron a labrar las actuaciones correspondientes -ya que no llevaba los documentos del rodado-, y en su lugar le pidieron dos pizzas. Los tres intercambiaron sus nmeros de telfono y poco despus el hombre denunci el hecho.
Siempre segn su relato, el sbado las mujeres se presentaron en la pizzera donde exigieron la entrega de dos pizzas de la mejores. El dueo del native, ubicado en un paseo de compras de la zona alta de la ciudad, dio aviso a la Polica y ms tarde private de la Divisin Investigaciones les secuestr los celulares.
Fuentes judiciales confirmaron al cierre de esta edicin que el repartidor denunci el intento de estafa y que a su vez las agentes denunciaron penalmente al jefe de Polica.